Es increible lo que puede hacer una persona. Puedes llegar a sentir el cielo y pueds llegar tan hundido en la mierda, que lo único que te queda es convertirte en ella.
Yo ahora stoy en el cielo, hacía tiempo que necesitaba sentirme asi, se agradece, lo malo es la distancia que nos separa. La forma de ver las cosas cambia.
Hoy he tenido un examen, y como es por norma general he llegado tarde, mi profesora flipada me ha dixo: "Este es el tercer examen que has tenido conmigo, y no ha habido a ninguno que hayas llegado puntual." No es mi culpa que intente llegar pronto y el transporte público decida truncarme esa propuesta.
Encima que voy extresado, para colmo me tengo que comer el cristal de la ventanilla, porque una mujer corpulenta me está ayudando a conseguirlo.La vida del que siempre llega tarde.